La ruta, dura y con alguna zona técnica, pero disfrutando de unas vistas espectaculares. El tiempo acompañó, calor y sol que dejaron marca en algunos andarines.
En el avituallamiento del castillo de Anento la mayoría siguieron la ruta establecida, unos pocos optaron por ir al Arguilay por la rambla.En el Arguilay se juntaron también un grupo de mujeres que decidieron darse un paseo desde el pueblo. Despues de este segundo avituallamiento bajamos al pueblo por la rambla.
Los garbanzos de la comida espectaculares.
Por la tarde, despues del café, jugamos con los juegos tradicionales, inauguramos los bolos de Used y la rana, que son las últimas incorporaciones que ha hecho la asociación. Jugamos a los hoyetes, al siete y medio, al peto, hicimos carreras de chapas. Vimos también como se jugaba a las tabas y recordamos las canciones que acompañaban al juego.
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